COMPETENCIAS BÁSICAS
EN ENSEÑANZA OBLIGATORIA
Las
competencias que debe haber desarrollado un joven o una joven al finalizar la
enseñanza obligatoria para poder lograr su realización personal, ejercer la
ciudadanía activa, incorporarse a la vida adulta de manera satisfactoria y ser
capaz de desarrollar un aprendizaje permanente a lo largo de la vida.
Finalidades.
1.-
integrar en las materias los diferentes aprendizajes (formales, informales y no
formales),
2.-
utilizar los aprendizajes de manera efectiva en diferentes situaciones y
contextos.
3.-
inspirar las decisiones del proceso de enseñanza y de aprendizaje.
Cada
área contribuye al desarrollo de diferentes competencias y, a su vez, cada una
de las competencias básicas se alcanzará como consecuencia del trabajo en
varias áreas o materias.
El
desarrollo de las competencias básicas debe complementarse con diversas medidas
organizativas y funcionales. Se favorecen La competencias::
- …de
comunicación, análisis del entorno físico, creación, convivencia y ciudadanía,
o alfabetización digital, desde:: la organización y funcionamiento de los
centros y las aulas, participación del alumnado, normas, metodologías y
recursos didácticos, concepción, de la biblioteca escolar,…
- … de regulación de los aprendizajes, el desarrollo
emocional o las habilidades sociales, desde la acción tutorial
- .. básicas en general desde las actividades
complementarias
En
el marco de la propuesta realizada por la Unión Europea, se identifican ocho
competencias básicas:
1. Competencia en comunicación lingüística
2. Competencia matemática
3. Competencia en el conocimiento y la interacción con el
mundo físico
4. Tratamiento de la información y
competencia digital
5. Competencia social y ciudadana
6. Competencia cultural y artística
7. Competencia para aprender a aprender
8. Autonomía e iniciativa personal
1. COMPETENCIA
EN COMUNICACIÓN LINGÜÍSTICA
Supone
la utilización del lenguaje como instrumento de
comunicación oral y escrita, de representación,
interpretación y comprensión de la realidad, de construcción y comunicación del conocimiento y de organización y
autorregulación del pensamiento, las emociones y la conducta.
Su
desarrollo comporta el dominio de la lengua oral y escrita en múltiples
contextos, y el uso funcional de, al menos, una lengua extranjera.
2.
COMPETENCIA MATEMÁTICA
Consiste
en la habilidad para utilizar y relacionar los números, sus operaciones
básicas, los símbolos y las formas de expresión y razonamiento matemático,
tanto para producir e interpretar distintos tipos de información, como para
ampliar el conocimiento sobre aspectos cuantitativos y espaciales de la
realidad, y para resolver problemas relacionados con la vida cotidiana y con el
mundo laboral.
Supone
aplicar aquellas destrezas y actitudes utilizando las herramientas de apoyo adecuadas,
e integrando el conocimiento matemático con otros tipos de conocimiento para
dar una mejor respuesta a las situaciones de la vida de distinto nivel de
complejidad.
3. COMPETENCIA EN EL CONOCIMIENTO Y LA INTERACCIÓN CON EL MUNDO FÍSICO
Es
la habilidad para interactuar con el mundo físico, tanto en sus aspectos
naturales como en los generados por la acción humana, de tal modo que se
posibilita la comprensión de sucesos, la predicción de consecuencias y la
actividad dirigida a la mejora y preservación de las condiciones de vida
propia, de las demás personas y del resto de los seres vivos. En definitiva,
incorpora habilidades para desenvolverse adecuadamente, con autonomía e
iniciativa personal en ámbitos de la vida y del conocimiento muy diversos (salud,
actividad productiva, consumo, ciencia, procesos tecnológicos, etc.) y para
interpretar el mundo, lo que exige la aplicación de los conceptos y principios
básicos que permiten el análisis de los fenómenos desde los diferentes campos
de conocimiento científico involucrados.
Son
parte de esta competencia básica el uso responsable de los recursos naturales,
el cuidado del medio ambiente, el consumo racional y responsable, y la
protección de la salud individual y colectiva como elementos clave de la
calidad de vida de las personas.
4. TRATAMIENTO DE LA INFORMACIÓN Y COMPETENCIA DIGITAL
Consiste en disponer de habilidades para buscar,
obtener, procesar y comunicar información, y
para transformarla en conocimiento. Incorpora diferentes habilidades, que van
desde el acceso a la información hasta su transmisión en distintos soportes una
vez tratada, incluyendo la utilización de las tecnologías de la información y
la comunicación como elemento esencial para informarse, aprender y comunicarse.
Su
desarrollo implica ser una persona autónoma, eficaz, responsable, crítica y
reflexiva al seleccionar, tratar y utilizar la información y sus fuentes, así
como las distintas herramientas tecnológicas; también tener una actitud critica
y reflexiva en la valoración de la información disponible, contrastándola
cuando es necesario, y respetar las normas de conducta acordadas socialmente
para regular el uso de la información y sus fuentes en los distintos soportes.
5.
COMPETENCIA SOCIAL Y CIUDADANA
Esta
competencia hace posible comprender la realidad social en que se vive,
cooperar, convivir y ejercer la
ciudadanía democrática en una sociedad plural, así como comprometerse a
contribuir a su mejora. En ella están integrados conocimientos diversos
y habilidades complejas que permiten participar, tomar decisiones, elegir cómo
comportarse en determinadas situaciones y responsabilizarse de las elecciones y
decisiones adoptadas.
Su desarrollo supone comprender la realidad social, afrontar
la convivencia y los conflictos empleando el juicio ético basado en los valores
y prácticas democráticas, y ejercer la ciudadanía, actuando con criterio
propio, contribuyendo a la construcción de la paz y la democracia, y
manteniendo una actitud constructiva, solidaria y responsable ante el
cumplimiento de los derechos y obligaciones cívicas.
6. COMPETENCIA CULTURAL Y ARTÍSTICA
Esta
competencia supone conocer, comprender, apreciar y valorar críticamente
diferentes manifestaciones culturales y artísticas, utilizarlas como fuente de
enriquecimiento y disfrute y considerarlas como parte del patrimonio de los
pueblos.
Esta
competencia se refiere tanto a la habilidad para apreciar y disfrutar con el
arte y otras manifestaciones culturales, como a aquellas relacionadas con el
empleo de algunos recursos de la expresión artística para realizar creaciones
propias;
implica un conocimiento básico de las distintas manifestaciones culturales y
artísticas, la aplicación de habilidades de pensamiento divergente y de trabajo
colaborativo, una actitud abierta, respetuosa y crítica hacia la diversidad de
expresiones artísticas y culturales, el deseo y voluntad de cultivar la propia
capacidad estética y creadora, y un interés por participar en la vida cultural
y por contribuir a la conservación del patrimonio cultural y artístico, tanto
de la propia comunidad, como de otras comunidades.
7.
COMPETENCIA PARA APRENDER A APRENDER
Aprender
a aprender supone disponer de habilidades para iniciarse en el aprendizaje y
ser capaz de continuar aprendiendo de manera cada vez más eficaz y autónoma de
acuerdo a los propios objetivos y necesidades.
Esta
competencia tiene dos dimensiones fundamentales. Por un lado, la adquisición de
la conciencia de las propias capacidades (intelectuales, emocionales, físicas).
Por otro lado, disponer de un
sentimiento de competencia personal, que redunda en la motivación, la confianza
en uno mismo y el gusto por aprender.
Aprender
a aprender implica la conciencia, gestión y control de las propias capacidades
y conocimientos desde un sentimiento de competencia o eficacia personal, e
incluye tanto el pensamiento estratégico, como la capacidad de cooperar, de
autoevaluarse, y el manejo eficiente de un conjunto de recursos y técnicas de
trabajo intelectual, todo lo cual se desarrolla a través de experiencias de aprendizaje
conscientes y gratificantes, tanto individuales como colectivas.
8. AUTONOMÍA E INICIATIVA PERSONAL
Esta competencia se refiere, por una parte, a la
adquisición de la conciencia y
aplicación de un conjunto de valores y actitudes personales interrelacionadas,
como la responsabilidad, la perseverancia, el conocimiento de sí mismo y la
autoestima, la creatividad, la autocrítica, el control emocional, la capacidad
de elegir, de calcular riesgos y de afrontar los problemas, así como la
capacidad de demorar la necesidad de satisfacción inmediata, de aprender de los
errores y de asumir riesgos.
La
autonomía y la iniciativa personal suponen ser capaz de imaginar, emprender,
desarrollar y evaluar acciones o proyectos individuales o colectivos con
creatividad, confianza, responsabilidad y sentido crítico.